En su décimo aniversario de colaboraciones con la Antártida, la CNEA instalará su cuarto sistema fotovoltaico en la Isla Vega para alimentar un refugio de estudios glaciológicos.
Mientras continúan operativos los sistemas en Carlini, Marambio y el refugio Elefante, estos proyectos no solo reducen la dependencia de combustibles fósiles, sino que también evitan emisiones de gases de efecto invernadero.
El Departamento de Energía Solar de la CNEA ha avanzado en sus iniciativas, destacando la instalación del cuarto sistema “aislado” en la Isla Vega, programado para fin de mes. Este refugio, clave para la investigación científica, dejará de depender del generador diésel gracias a la energía solar.
La base Carlini celebra un año de operación del sistema conectado a la red, aportando 1150 kWh. Mientras tanto, en diciembre, el sistema pionero en la Base Marambio cumplirá una década, con un rendimiento superior gracias a condiciones meteorológicas favorables.
El Refugio Elefante, operativo entre septiembre y marzo, ha eliminado la necesidad de generadores diésel, generando un entorno tranquilo que atrae a la fauna.
Estas iniciativas forman parte de un proyecto de inversión pública desde 2024, con la esperanza de ampliar el uso de energías renovables en la región y obtener datos valiosos sobre la eficiencia de los paneles solares en bajas temperaturas.
Fuente: https://www.argentina.gob.ar/cnea
