Verónica Lorenzone es abogada e investigadora de la UNJu. En su obra indagó buscando profundizar en la actividad minera de Jujuy. La publicación propone un “abordaje sostenible, una reseña histórica y un acercamiento a pueblos originarios”. La abogada Verónica Lorenzone compartió su trabajo en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Jujujuy (UNJu) junto a sus autoridades.
La presentación se realizó en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Jujuy y contó con la participación de autoridades de la Casa de Estudios. Sobre el libro “Actividad minera: Desarrollo sostenible en Jujuy”, la autora explica que fue producto de un trabajo que inició en 2009 en un contexto complejo para el sector, “se había suspendido la actividad minera porque no había reglamentación ambiental. Yo como docente no me quería quedar con eso, quería saber más”, explicó y recordó que -en ese entonces- el director de la carrera de Ingeniería en Minas era el Ing. Carlos María Navarro, quien la instó a investigar focalizándose en desarrollo sostenible. Posteriormente Secter (Secretaria de Ciencia y Técnica y Estudios Regionales) les dio la posibilidad de publicar el libro que llevó muchos años realizar y que ahora se presenta con los resultados de la investigación.
“Se habla de sustentable o sostenible y, de acuerdo, a los autores consideran que el término correcto es sostenible porque es lo que se refiere a un proceso que se mantiene en el tiempo y no sustentable porque es algo que se refiere a lo que se puede fundamentar o sostener”, afirmó.
En materia minera, abordó tres aspectos: lo ambiental, lo social y lo económico. Estos aspectos que tienen indicadores distintos y una forma diferente de medirlo. Basada en un autor holandés planteó que es necesaria una armonía entre estos tres aspectos para que haya un desarrollo sostenible, y aseguró que esto implica estudios de campo.
“En materia minera es así, o sea, como resultado de todo lo que hemos investigado podemos señalar que -por ejemplo- no es lo mismo un modelo sostenible para Mina Aguilar que para Pirquitas o para un proyecto de litio en Surques. Cada caso requiere un estudio de campo de lo que es la producción minera, en sí, de la comunidad, del ambiente del lugar, de las necesidades económicas. La política pública debe buscar armonizar esos aspectos”, precisó.
Mina Pirquitas
Destacó que en el libro también abordó la historia de la minería de Aguilar y Pirquitas, de los primeros mineros jujeños y extranjeros que hicieron minería en Jujuy, incluyendo los lavadores de oro. Acompañó con fotos que le acercaron familiares y colegas que han sido en su momento parte de la actividad como el caso del geólogo Juan Carlos Lavadens quien fue policía minera y vivió en Aguilar.
Mina Aguilar
La investigación
Como parte del trabajo presentado, se contempla el análisis de encuestas realizadas entre 2015 y 2019 a los habitantes de Susques. Esa información luego fue actualizada en datos que luego fueron pasados a gráficos por Patricia Rivas y Rosario Lobos, quienes los realizaron. Analizaron parte de los proyectos Pirquitas, Aguilar, Sales de Jujuy y Exar. En éstos casos se realizaron estudios entre 2011 (con estudiantes) y se actualizaron en 2019, lo cual permitió ponderar el crecimiento de la actividad. Entre los agradecimientos Lorenzone destaca también la ayuda de docente de la Facultad de Ingeniería, como el Ing. Daniel Valverde, el geólogo Waldo Chayle, el Ing. Huertas, el docente titular de la cátedra de Legislación Minera, geólogo Miguel Soler y fotos de Osvaldo Córdoba.
Recordó que ambos proyectos de litio se trabajaron con las 10 comunidades de pueblos Atacama, mientras los metalíferas como Pirquitas o Aguilar son comunidades coyas: “Los cuatro proyectos desde el inicio siempre han participado, han comunicado y han informado a las comunidades, y ahí valoramos el tema de sostenibilidad”, explicó.
Por otro lado mencionó a figuras históricas de Jujuy, entre ellos Eugenio Tello quien fue gobernador, Joaquín Carrillo cuyo nombre ahora lleva la Escuela de Minas, y Benjamín Villafañe, todos defensores de actividad minera. Recordó que Tello y Carrillo, cuando se cumplieron 100 años en la Revolución francesa, investigaron y llevaron hasta Francia lo que en ese momento se hacía en Jujuy que por entonces era de lavadores de oro también. Sobre Benjamín Villafañe, quien fue senador y gobernador, dijo que defendió la minería.
Lorenzone recordó que, en la parte pública, la autoridad de aplicación en Jujuy está a cargo de aplicar este nuevo paradigma de la industria minera porque a partir del ’94 la Constitución Nacional exige que sea sostenible. Explicó que dentro del Ministerio de Desarrollo Económico está la Secretaría de Minería e Hidrocarburos y la Dirección Provincial de Minería que es la que evalúa los Informes de Impacto Ambiental y, por otro lado, el Juzgado de Minas que otorga las concesiones y permisos para hacer la actividad minera. Éste es el esquema básico de trámites que se deben realizar en Jujuy para una exploración u operación minera.
“Lo que se quiere hoy es que no solo haya gran minería, sino también que se pueda fomentar la Pequeña y Mediana Minería. No es lo mismo exigir a una gran minería que a un lajero o a un salinero.
Con respecto a las regalías, la investigadora comentó: “El que conoce la actividad minera, entiende que no deja sólo la regalía. Desde el ‘día cero’, la actividad tiene que informar a la comunidad superficiaria y tiene que gestionar ambientalmente esos recursos mineros, de qué manera van a impactar en el ambiente y cómo lo van a remediar. Y una actividad minera, requiere de muchos proveedores locales para cubrir lo que genera la actividad minera, catering, alojamiento, camino, transporte, entonces es por eso se dice de la minería es madre de industrias”, precisó.
Destacó lo necesaria que es la minería porque sin ella no podría tener el micrófono por el que está hablando, el celular, nada de la infraestructura, por lo que consideró que el desafío es hacerlo en forma sostenible. Planteó que la conclusión es que es un estudio de campo en cada proyecto que se realiza para que sea sostenible, contemplando el aspecto social, ambiental y económico.
De la presentación también participaron la vicerrectora de la UNJu, Liliana Bergesio; el decano de la Facultad de Ingeniería, Alejandro Vargas y Analía Rivera, de Ediunju, el diseñador Edgardo Gutiérrez; a quienes agradeció. Finalizando la ceremonia ser procedió a la entrega de ejemplares destinados a la Biblioteca de la UNJu.