La transversalidad se plantea como una estrategia para conseguir que las preocupaciones y experiencias de las personas -desde la diversidad y en condiciones de vulnerabilidad- sean parte integral de la elaboración, puesta en marcha, control y evaluación de las políticas y los programas económicos y sociales.
Es así que, para esta temática, conversamos con la Licenciada Leticia Cortese Rodríguez, para poder comprender los alcances y que propone este nuevo paradigma.
¿Qué propone la transversalización del enfoque de género?
Leticia: la transversalización de la perspectiva de género implica considerar las necesidades, preocupaciones y experiencias de varones, mujeres y otras identidades no binarias al diseñar, implementar o evaluar políticas, programas o proyectos, garantizando que todas las personas se beneficien de igual manera. Su objetivo es alcanzar la igualdad de género, lo cual exige desplegar mecanismos que reconozcan los diversos puntos de partida individuales.
Este enfoque supone un cambio de paradigma, promoviendo una perspectiva amplia en todas las áreas y procesos organizativos. Es un proceso gradual que demanda tiempo y aprendizaje institucional.
Finalmente, la transversalización significa integrar la perspectiva de género a lo largo de toda la organización y sus procesos, considerando las necesidades y experiencias de varones, mujeres e identidades no binarias.
¿Cómo se viene aplica en las industrias argentinas?
Leticia: en general, las organizaciones comienzan abordando la agenda de género con medidas de acción afirmativa, tales como los cupos para que el género menos representado pueda acceder a un determinado puesto, o acciones dirigidas exclusivamente a las mujeres, compensando desequilibrios de género, pero, sin transformar sus causas. Luego avanzan a medidas con perspectiva de género, enfocadas en revertir las causas subyacentes de la desigualdad. Un ejemplo es la implementación de licencias equitativas para madres y personas no gestantes, que facilitan la corresponsabilidad en el cuidado y la redistribución de tareas que tradicionalmente recaen en las mujeres.
Desde la educación ¿cómo se desarrolla la perspectiva de género en las industrias Argentina?
Leticia: la educación desempeña un rol esencial en el desarrollo de una perspectiva de género en las industrias argentinas. Es crucial incluir contenidos relacionados con el género en la formación y capacitación de profesionales. Esta inclusión sensibiliza sobre cuestiones de género, fomenta la reflexión sobre estereotipos y contribuye a establecer entornos laborales más equitativos.
En este sentido, muchas industrias han emprendido iniciativas significativas. Por ejemplo, establecen colaboraciones con instituciones académicas para alentar a más mujeres a cursar carreras que históricamente han sido dominadas por varones, como las STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Asimismo, se desarrollan programas de capacitación laboral para equipar a las mujeres con habilidades necesarias en áreas específicas.
En cuanto a la formación ¿cómo se está trabajando para implementarla?
Leticia: un enfoque crucial es la capacitación interna en las empresas. Estos programas buscan identificar y abordar sesgos y estereotipos de género, prevenir y eliminar la violencia, así como fortalecer habilidades blandas para que las mujeres puedan acceder a roles de mayor responsabilidad. Estas iniciativas no solo promueven la igualdad de género, sino que también enriquecen la diversidad y el rendimiento en el lugar de trabajo.
Romper esas brechas en un trabajo de todos/as. En ese sentido, ¿cómo está trabajando para lograrlo? ¿En qué situación se encuentra hoy en día?
Leticia: romper las brechas de género es un esfuerzo que involucra a múltiples actores, desde el sector público hasta el privado, pasando por organismos internacionales, la academia, organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales. A pesar de los avances de las últimas décadas, las dificultades persisten. Los estereotipos de género continúan arraigados, la representación femenina en roles de liderazgo sigue siendo baja y las situaciones de violencia y acoso afectan a mujeres y niñas. La pandemia exacerbó estas desigualdades, impactando especialmente a las mujeres.
Es fundamental redoblar los esfuerzos. Colocar a las mujeres y niñas en el centro de las economías resultará en un desarrollo más equitativo y sostenible, acelerará la recuperación y nos llevará más cerca de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Desde tu experiencia ¿cuál es tu aporte?
Leticia: en mi rol como consultora en género para empresas, mi enfoque se centra en brindar asesoramiento y acompañar a las organizaciones en el desarrollo e implementación de planes para fomentar la igualdad de género. Colaboro con empresas para implementar políticas inclusivas y promover un cambio cultural.
Actualmente, observo un mayor reconocimiento en Argentina sobre la importancia de la igualdad de género en el desarrollo sostenible. Sin embargo, aún enfrentamos desafíos para transformar profundamente las estructuras tradicionales y lograr una equidad real.
Sobre Leticia Cortese Rodríguez
Leticia es Licenciada en Administración, diplomada en Políticas Públicas para el Desarrollo Local y Regional y cuenta con una Maestría en Política y Gestión Local. Además, es consultora con una amplia experiencia en temas relacionados con desarrollo sostenible, políticas públicas, género y responsabilidad social empresaria, entre otros. Ha trabajado con destacadas instituciones como ONU Mujeres, Banco Interamericano de Desarrollo y la Organización Internacional del Trabajo, así como con diversas empresas, brindando asesoramiento especializado. Ocupó el cargo de subsecretaria de Financiamiento y Competitividad Pyme en el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación. También se ha desempeñado como funcionaria en el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Mendoza y en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Cuyo. Tiene una amplia trayectoria en docencia y gestión universitaria y ha sido asesora de gobiernos locales en la provincia de Mendoza.
